¿Alguna vez has soñado con tener tu propia cabaña junto al mar, donde puedas escuchar el sonido de las olas y ver el cielo azul y la playa de arena dorada todos los días al despertar? Recientemente, alquilé una casa con vistas al mar en la costa de Guangdong por sólo 600 yuanes al mes y hice realidad este sueño. Pero esta experiencia me hizo pensar más profundamente en el "supervalor" y las "preocupaciones ocultas".
Esta casa con vistas al mar está situada en la ciudad de Shapa, ciudad de Yangjiang, provincia de Guangdong, a sólo 500 metros de la costa, con una bahía azul justo fuera de la ventana. El conjunto de habitaciones mide unos 45 metros cuadrados, con un dormitorio, un salón y un baño, completos con electrodomésticos, y cada estancia es independiente. La razón por la que el alquiler es tan barato es que está ubicado en una zona remota, no hay grandes ciudades en un radio de cien millas y la tasa de ocupación no es alta. Pero para mí el medio ambiente aquí simplemente vale la pena.
Cada mañana, cuando el primer rayo de sol entre en la habitación, me despertará el sonido de las olas. Sentado en el balcón con una taza de café y un libro, podrá pasar una mañana tranquila. Por la noche podrás dar un paseo por la playa y sentir la suave brisa del mar y la tranquilidad del cielo estrellado.
Sin embargo, esta ciudad costera aparentemente perfecta esconde un problema preocupante: la contaminación ecológica. Cuando intenté encontrar las conchas más hermosas a lo largo de la costa, me molestó un olor acre a pescado. El olor se hacía más fuerte cuanto más se acercaba al río, haciendo casi imposible respirar.
Después de investigar, descubrí que el olor a pescado provenía de una granja de mariscos cercana. Las aguas residuales de estas granjas deberían verterse al mar después del tratamiento, pero el olor a pescado sigue siendo muy fuerte. Para empeorar las cosas, el agua de mar cercana a menudo se vuelve roja. Esto puede deberse a los nutrientes de las aguas residuales industriales, domésticas y de acuicultura que favorecen la reproducción del plancton, lo que provoca el fenómeno de la marea roja. Las mareas rojas no sólo provocan asfixia o envenenamiento de especies de peces, sino que también provocan efectos a largo plazo en los ecosistemas marinos.
Esta experiencia en el pueblo costero me hizo reflexionar profundamente. Cuando buscamos una experiencia de vida de “supervalor”, a menudo tendemos a ignorar los problemas ecológicos que hay detrás de ella. Estos problemas de contaminación aparentemente lejanos están en realidad estrechamente relacionados con cada una de nuestras vidas.
Por lo tanto, hago un llamado a todos a prestar más atención a los problemas ecológicos y ambientales que nos rodean, comenzar desde las pequeñas cosas, reducir las emisiones contaminantes y proteger nuestra casa común. Al mismo tiempo, también se espera que los departamentos pertinentes puedan fortalecer la supervisión y la gobernanza para garantizar la salud y el desarrollo sostenible de los ecosistemas marinos.
Finalmente, lo que quiero decir es que aunque esta habitación con vistas al mar me ha traído muchos recuerdos y experiencias maravillosas, también espero que el entorno ecológico aquí pueda protegerse y mejorarse mejor. Trabajemos juntos para dejar un mundo mejor para las generaciones futuras.
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